Termina
septiembre y apenas tiñen sus puntas las enredaderas. El tiempo innegablemente caprichoso
se precipita y cae con la certeza del final.
Me incomoda
esta sensación vertiginosa que alcanza lo inevitable. Se acercan los días pintados
indecorosamente de ocres, resueltos de amarillos.
La belleza muda
del descanso y la renovación.
El cielo se
cubrió con la prestancia sostenida y pesada de las aguas, deseando redimirse en
la tierra hambrienta.
Todo está preparado
con resolución.
La única
estación.
Promesa
prendida en las hojas aun vivas. Listas para enterrarse una vez más en la magia
del cambio necesario.
Luego vendrán
los días, que pintaran de cálidos colores los bosques de los hombres y cubrirán de
alfombras color ámbar los destellos de nuestras pisadas… y no haremos caso.
Pero esta
tierra nos perdonará una vez más mostrándonos su milagro. El descanso del
crepitar de los árboles. El triunfo bermellón de la transformación.
Solo nos
espera la paciencia de la metamorfosis.
Y mientras
trama el destino su historia, me concede el regalo de la palabra escrita,
envuelta en tapas negras donde escondí arropadas por otras hojas, el monólogo
del adiós entregado ya sin remisión en “El tacto de la luna Hiriente”.
Libro: "El tacto de la luna hiriente" Ediciones Vitruvio. |
De nuevo mi
agradecimiento a Ediciones Vitruvio.
Besos a todos.
Besos a todos.
Quería decirte Rosa María que hoy estaré acompañándote en la presentación de tu segundo poemario.
ResponderEliminarMe gusta tu poesía y me he sentido identificada contigo por el hecho de la coincidencia de las fechas de presentación -el primero de ambas en la primavera de 2014 y el segundo en este otoño que nos ampara -mi presentación será el 6 de noviembre- así como en las colecciones en las que se han editado.
Un abrazo.
Se me ha olvidado la firma a mi comentario: Isabel F. Bernaldo de Quirós
EliminarQuerida Isabel, fue un placer conocerte. Te deseo todo lo mejor para tu próximo libro. Muchas gracias por tu compañía ayer y tus generosas palabras.
EliminarQuerida Isabel, fue un placer conocerte. Te deseo todo lo mejor para tu próximo libro. Muchas gracias por tu compañía ayer y tus generosas palabras.
EliminarUn placer que ha sido mutuo. Muchas gracias y un gran abrazo.
ResponderEliminarIsabel